A sus 79 años, murió este sábado Roberto Dromi, conocido por ser ministro de Obras Públicas durante el gobierno de Carlos Menem. Según trascendió, el exfuncionario presentaba algunas dificultades en su salud, lo que llevó al término de su vida este fin de semana.
En lo que respecta al ámbito político, será recordado por haber sido una pieza clave durante la década menemista, diseñando el esquema de privatización para las empresas de servicios públicos. De hecho, fue el autor de la siguiente célebre frase: “Nada de lo que deba ser del Estado seguirá en manos del Estado”.
En este sentido, Dromi fue el encargado de diseñar los cambios en la estructura estatal que llevó adelante Menem durante la década del 90. Junto a Carlos Corach, fue una de las figuras fundamentales de la gestión del riojano.