El partido ultranacionalista FPÖ, de extrema derecha, ganó este domingo las elecciones parlamentarias en Austria por primera vez, al alcanzar el 29,1% de los votos.
El partido subió 13 puntos respecto a los resultados que obtuvo en 2019. Se caracteriza por tener un discurso de anti inmigración y además tuvo una postura crítica con las medidas tomadas por el actual Gobierno, de conservadores y ecologistas, para controlar la pandemia de la covid-19.
Por otra parte, el Partido Popular austríaco (ÖVP), representante del Ejecutivo saliente, perdió 11 puntos en comparación a las últimas elecciones. Según este primer cálculo, que usa voto real como base, el socialdemócrata SPÖ sería la tercera fuerza, con el 20,4% (-0,8).
Este triunfo pone en jaque a los países que forman parte de la Unión Europea (UE) porque demuestra un tendencia de los ciudadanos a virar hacia la derecha como lo hicieron en Francia, Italia, Alemania y Países Bajos.