La escalada del conflicto en Israel desencadenaron una serie de movimientos significativos en los mercados financieros globales, particularmente en el sector de las criptomonedas vinculadas al oro. El precio del oro ha alcanzado un nuevo máximo histórico, superando los 2.430 dólares por onza, lo que ha impulsado al alza a las stablecoins respaldadas por este metal precioso.
El aumento del precio del oro ha tenido un impacto directo en las principales stablecoins ancladas al oro, como Tether Gold (XAUt) y Pax Gold (PAXG). Tether Gold, la stablecoin con la mayor capitalización de mercado, ha alcanzado un nuevo máximo histórico de 2.500 dólares, mientras que Pax Gold ha experimentado un aumento aún mayor debido a una demanda intensificada.
En el caso específico de Pax Gold, se registró un pico de 3.300 dólares en el exchange Binance, aunque esta cotización solo se mantuvo durante unos minutos antes de retroceder a alrededor de 2.375 dólares, alineándose con el precio del metal precioso en sí.
A pesar de que Tether Gold y Pax Gold lideran en capitalización de mercado con 581 millones y 434 millones de dólares respectivamente, otras stablecoins vinculadas al oro, como Comtech Gold (CGO), VX Gold (VNXAU) y tGOLD (TXAU), están por debajo del puesto 1.000 en el ranking de criptoactivos.
Es importante destacar que estas últimas stablecoins, a diferencia de XAUt y PAXG, siguen el precio del oro por gramo en lugar de por onza, lo que resulta en precios relativamente más bajos. Por ejemplo, alcanzaron un ATH de alrededor de 78 dólares durante los recientes movimientos del mercado.
El incremento en el precio del oro y el consecuente impulso de las stablecoins ancladas a este metal precioso se produjo en respuesta al ataque de Irán a Israel, un evento que generó una creciente incertidumbre en los mercados financieros globales. El oro, tradicionalmente considerado un activo de refugio seguro en tiempos de crisis, atrajo a los inversores en busca de protección.
Impacto en otros activos
El aumento del precio del oro contrastó con la caída del bitcoin (BTC) y otros mercados tradicionales, lo que sugiere que el bitcoin, a pesar de su apodo de “oro digital”, está siendo considerado actualmente como un activo de riesgo por parte de los inversionistas.
Sin embargo, históricamente, tanto el bitcoin como el oro han experimentado reacciones al alza en momentos de crisis, debido a su percepción como reservas de valor debido a su emisión descentralizada y su capacidad para resguardar la privacidad. Por lo tanto, es posible que tanto el bitcoin como las criptomonedas vinculadas al oro continúen siendo impulsadas al alza si la incertidumbre asociada con el conflicto en Israel persiste.
En conclusión, el conflicto en Israel ha generado una serie de movimientos significativos en los mercados financieros globales, particularmente en el sector de las criptomonedas vinculadas al oro. El aumento del precio del oro ha impulsado al alza a las principales stablecoins ancladas a este metal precioso, mientras que el bitcoin ha experimentado una reacción mixta, mostrando signos de ser considerado tanto un activo de refugio seguro como un activo de riesgo
