La reciente aprobación en la Cámara de Diputados de la Ley de Bases desató la preocupación en diversos sectores de la sociedad, pero ninguno parece ser más vulnerable que la Industria de la Construcción. Desde la asunción de Javier Milei, este sector fue golpeado repetidamente, y los efectos se sienten especialmente en La Plata.
En el primer trimestre de este año, según un informe del ingeniero Claudio Velázco, la actividad de la construcción experimentó una caída del 31,6 % en comparación con el mismo período del año anterior. Esta disminución drástica es el resultado directo de la paralización total de la Obra Pública Nacional, junto con las medidas macroeconómicas de recesión implementadas por el gobierno.
La aprobación de la Ley de Bases parece ser simplemente una formalidad para legalizar las medidas ya implementadas por el Gobierno Nacional, pero su impacto será devastador para muchas empresas, especialmente las pequeñas y medianas.
A nivel nacional, más de 21.000 empresas y subcontratistas se encuentran activos en el rubro de la construcción. Estas empresas no solo representan una fuerza laboral significativa, sino que también sustentan a profesionales, técnicos, obreros y administrativos.
La reducción drástica de la obra pública bajo el gobierno de Milei dejó en jaque a miles de trabajadores. De las más de 2.300 obras públicas en ejecución al inicio de su mandato, solo el 20 % permanecerá activo, lo que se traduce en una pérdida masiva de puestos de trabajo.
“No es difícil imaginar que, con todo el panorama presentado, el panorama para los
Obreros de la Construcción no es nada alentador. Si se suman todas las
situaciones que están llevando a profundizar todas las paralizaciones antes
descritas, estimo que un 80 % de esa gran masa de 530.000 trabajadores,
quedará sin trabajo”, explicó el ingeniero en su informe.
Sin embargo, el problema va más allá de la obra pública nacional. La decisión de recortar fondos a las provincias está causando estragos en las finanzas regionales, lo que lleva a la paralización de obras públicas provinciales y municipales. La incertidumbre económica también ha llevado a la paralización de numerosas obras privadas, lo que ha afectado aún más la industria de la construcción.
Cómo afecta la paralización de la obra pública en La Plata
En La Plata, el impacto de esta crisis es palpable en la paralización de importantes obras, como el distribuidor de la autopista La Plata-Buenos Aires en la avenida 520. A pesar de los anuncios de reinicio de la construcción, la obra sigue estancada, dejando en el limbo a trabajadores y autoridades locales.
Si bien la construcción fue paralizada por la Provincia luego de que el gobierno de Javier Milei frenara la obra pública a nivel nacional, en febrero de este año fue AUBASA, la propia empresa estatal concesionaria de la Autopista, la que anunció que a principios de marzo se reanudarían los trabajos, lo que daba a entender que estaba en dinero disponible y la orden oficial para terminar la bajada.
Sin embargo, eso no sucedió y se priorizaron obras en otros tramos (y otros municipios), por ejemplo la subida a la mano que va hacia La Plata en Berazategui, donde gobierna Juan José Mussi.
La importancia de esta obra para la ciudad no puede ser subestimada. No solo facilitaría el flujo de vehículos y conectaría La Plata con importantes centros industriales y comerciales, sino que también crearía empleo y estimularía la economía local.
El recorte también afecta a la planificación de la nueva autopista del Oeste que propuso Julio Alak, que permitirá generar un nuevo acceso al Partido desde la Ruta 2.
La idea de la administración actual es impulsar esta obra sobre la traza de la avenida 52, hasta el casco fundacional de La Plata, como puerta de acceso rápido a la Región Capital.
La Autopista del Oeste tendría cuatro carriles y contaría con bajadas en todas las avenidas. A su vez, en el Plan Estratégico 2030, la gestión de Alak adelantó la intención de establecer nuevos polos cívicos y culturales en esta zona.
Si bien es una obra de la cual debe hacerse cargo el gobernador Axel Kicillof, desde Provincia afirman que los recortes del gobierno nacional no permiten avanzar en estos proyectos.
En resumen, la industria de la construcción en La Plata y en todo el país enfrenta una crisis sin precedentes. Si no se toman medidas urgentes para reactivar la actividad, miles de empresas y trabajadores se enfrentarán a un futuro incierto. La situación exige una acción coordinada a nivel nacional, provincial y municipal para impulsar la construcción y evitar un desastre económico y social.